En estos días la cooperativa Piztu ha cumplirdo su primer año de existencia y el pasado sábado 29 de abril celebró su primera junta general.
PIZTU es una comunidad sin ánimo de lucro creada para que las personas asociadas se organicen para hacer posible una transición energética justa y ecológica. Trabajando en grupo queremos, entre otras cosas, producir energía, compartirla y establecer mecanismos para gestionarla mejor.
Reunidas en Aita Mari Antzokia las personas asociadas hicieron un repaso a lo realizado durante el último año, aprobaron las cuentas y dieron también el visto bueno al plan de gestión del año 2023. Los retos que tenemos como comunidad energética son muchos, aunque hay que admitir que mientras aumenta su masa social, la ambición con la que afrontarlos ha de ser moderada. Entre otros objetivos, para el año 2023 Piztu quiere:
- Materializar su primera instalación fotovoltaica sobre tejado (siempre sobre suelo ya artificializado)
- Estudiar opciones de instalaciones de renovables diferentes a la fotovoltaica.
- Proyectar la primera rehabilitación de un edificio.
- Conseguir abrir al público un punto de atención estable.
- Continuar con las charlas divulgativas y otras acciones de formación y sensibilización.
- Formar a las personas socias cara a la integración de colectivos vulnerables en la cooperativa.
- Impulsar acciones de movilidad sostenible como el vehículo compartido o el uso de la bicicleta.
- Profundizar en aspectos relacionados con la agroecología, promoviendo, por ejemplo, las huertas de proximidad, los grupos de autoconsumo, o los acuerdos de custodia del territorio que permitan poner en valor tierras hoy en desuso.
¿Quieres colaborar para que alguno de estos propósitos se haga realidad? ¿Crees que puedes ayudar? Búscanos en las redes sociales, entra en piztu.eus o escríbenos a info@piztu.eus. ¡Qué no sea por no intentarlo!